domingo, 25 de mayo de 2008

La nueva inquisición

Intolerancia y Discriminación

Mexicanos unidos por un solo motivo. Organizados por una razón en común, y no es para apoyar a la selección mexicana de futbol, ni tampoco para demandar a su gobierno el cambio tan prometido que desde hace años lo han dicho y que nomás no llega, claro que no. El motivo es mucho más grande que todo ello, y es realizar un acto de discriminación e intolerancia contra un grupo social, algo que no es muy común en el pueblo mexicano.

Como la mayoría de nosotros ya sabemos el pasado 15 de marzo, un grupo de jóvenes mexicanos, se reunieron en la plaza de armas del estado de Querétaro para agredir, ya no solo verbalmente sino también físicamente a un grupo social o tribu urbana, como gusten llamarle, a los que denominan “Emos”. Esta tribu urbana, grupo social o moda que sin importar sus características, son personas pacificas, fueron agredidas por un grupo de jóvenes mexicanos catalogados según ellos como punks, rockers, skates, etc. de modas, con el pretexto de que los llamados “Emos” copearon su estilo, o que se apoderaron da la plaza de armas, o que por que son personas con tendencias bisexuales, etc. de diferencias no aceptadas por la generalidad del pueblo mexicano. Estos jóvenes decidieron acabar con este grupo no aceptado con sus propias manos, donde lo más probable es que todos solo por seguir lo que hace la masa o la mayoría; ya que la sociedad es la que marca que grupo es el correcto, el aceptado y cual es el discriminado el que no es aceptado por la mayoría, el que según la sociedad es el grupo malo, por que la sociedad es la que dice que es bueno y que es malo, siempre es todo a elección de una estupida mayoría. Que si por que no eres católico, heterosexual, punk, mexicano etc., eres un marginado, eres de esa estupida minoría, y por ser eso una minoría estas del lado malo, el no aceptado.

Si para los mexicanos la apariencia es tan importante, no saben que buena apariencia están dejando ante los demás países del mundo.

Ha iniciado a caso una nueva inquisición en México, donde los que piensan o hacen cosas no comunes, o simplemente con una discrepancia a lo que hace la mayoría, deben ser erradicados como si fuesen plagas?.

Se les olvida a estas personas que todos somos diferentes, ya sea raza, sexo, religión, grupo social, y hasta especie, por que también el ser humano, realiza actos de discriminación contra los seres no humanos.

Ya no interesa que dice la mentada y obsoleta constitución mexicana sobre la libertad de expresión, ni lo que dice Declaración Universal de los Derechos Humanos sobre ello, estas normas están más pisoteadas que nada y no tienen mayor importancia.

Al final de cuentas este suceso de discriminación puede ser solo una cortina de humo mas creada por los gobernantes de este país para esconder sus estafas y su poca actividad como administradores del pueblo.
Tal parece que en este México intolerante, uno tiene que guardar la apariencia, fingir algo que no somos, para ser aceptados por una estupida mayoría, y guardar nuestra forma de ser para lo que venga después de la vida, supongo que es la forma de pensar que debemos tener. Quizá los mexicanos están condenados a ser reprimidos desde que llegaron los españoles y nos impusieron su religión y modo de vida, aun que no puedo culpar ese suceso ya que la discriminación e intolerancia esta en todo el mundo, claro mas en unas partes que en otras.

Desde chicos se nos marcan una manera de vivir, para acoplarnos a la masa, nos dicen como debe ser el mexicano ideal, no solo en nuestra familia sino en todos los medios de comunicación y en general todo el medio ambiente nos lo señala a todo momento.

Ahora resulta que ser un mexicano ejemplar es tener que vestirnos formales en todo momento, a alabar a los dichosos símbolos patrios, mostrar en todo ese patriotismo y orgullo de ser mexicano al cual no le encuentro sentido y tener que estudiar leyes, para al final trabajar para su querido país y llevarlo a ese primer mundo de corrupción, intolerancia y discriminación o mas bien simplemente mantenerlo como esta, a un que cada vez este peor.

El mundo de anarquía y libertad cada vez lo veo más utópico de lograr; mientras los seres humanos no aprender y respetar las diferencias que existen entre todos, jamás se podrá lograr.

Pero de ustedes queridos hermanos no me quejo, todos son muy tolerantes, a demás de que me aceptaron en su grupo, a pesar de no tener una patria, una religión aceptada, de que mis ideas que pueden sonar locas o desquiciadas para los demás, etc. A pesar de las diferencias que tenemos entre nosotros, nos aceptamos y respetamos. Es lo que mas amo de la Teamini Libertad. Es un pedazo de ese mundo utópico de libertad en el que sueño.




Ernesto Ruiz Macias



Para conseguir el don de la libertad es necesaria la virtud del respeto

viernes, 23 de mayo de 2008

Entre reflejos

Primero.
Reclamando propiedades jamás deseadas, saboreando olores eternamente insípidos, desagradables. Palpando las paredes del cuerpo extraño, vil, repugnante, tal vez con la intención de encontrar algún rastro de placer olvidado.
Observando su cuerpo, queriendo descubrir un punto de obsesión y de amor. De ese amor que venden en las esquinas en cajitas de cartón en forma de chicle.
Sintiendo solo frío y un inmundo calor producto de la fricción ¡bendita física! Me regalas el maquillaje que aparenta un calor como el del baile que es hacer el amor.
Sigo tambaleándome, buscando un equilibrio en esta espantosa danza aun con la certeza de que no lo encontrare. Como una patética reacción natural de querer salvar lo perdido. Y desando, a pesar de todo, nunca terminar para así poder creer que nunca comencé esta horrible soledad.

Segundo.
En la profundidad del espejo logro apreciar dos siluetas rojas, a punto de fundirse en una misma; bailando al ritmo de las placenteras caricias, sin pasado, sin pretender un futuro, sin olor y sin sabor.
También puedo ver un eco, un hermoso eco de suspiros frustrados en nuestro caparazón, el mismo eco que una vez dio luz a las profecías de un futuro mejor.
Como fondo aparece un mar turbulento, de esos que no sabes si son el preámbulo de un bello día o la advertencia palpitante y amenazadora de una catástrofe.
Cuando miro hacia arriba del espejo, observo curiosa la foto del momento, el escrito de tus días pasados, la mugre de tu vida de cartón, la sangre de tus suicidios anteriores, los suicidios que te enviciaron a seguir viviendo.
Como marco aparecen miles de sombras minúsculas que no dejan ver –gracias al cielo- más allá de nosotros dos.
Algo interrumpe el reflejo, son los pasos de tus manos al recorrer el laberinto del erotismo, el que me lleva de nuevo a nuestro encuentro.
Logras desviar mi atención y desaparece todo para que otra vez, en otro día, en otro mes, dibuje con palabras lo que cada tarde pretendes vivir en mi.

Por : Alejandra Tavares Blancarte